(Este post es continuación del anterior. Léelo antes, si no has hecho ya)
Los dos últimos pasos de este proceso “tipo” de digitalización progresiva no los dan todas las empresas. Algunas, simplemente porque no tienen volumen suficiente de datos que lo justifiquen. Otras porque no son conscientes (aún) de las ventajas que proporcionan.
Pongámonos en el caso de una empresa de un cierto tamaño que sí tiene un volumen de información importante. Ya ha recorrido todo el proceso anterior (descrito en el post previo) pero se da cuenta de que necesita herramientas más potentes para gestionar mejor los datos que acumula en su trabajo diario. Podemos decir, en resumen, que su ERP “de toda la vida” se le ha quedado corto.
El siguiente paso sería realizar análisis de sus procesos de negocio, de sus bases de datos de pedidos, facturas, cobros… y también de la gestión del almacén, inventario, procesos de producción…
Es el momento de instalar un programa de “business analytics”, un software que consulta toda la información de la empresa, agrupa resultados relevantes, cruza datos de diferentes departamentos, busca patrones y, con todos estos datos genera informes y gráficos con información relevante para los gestores.
Este tipo de programa necesita una adaptación a las necesidades concretas de cada cliente para elegir los datos de entrada relevantes y el formato de los datos de salida, de los informes generados. Por este motivo, las versiones más recientes suelen incluir un interfaz muy sencillo para crear “cuadros de mando” (dashboards) a medida a partir de plantillas predefinidas y componentes visuales.
Con su ayuda, los administradores de una empresa puede conocer prácticamente en tiempo real información muy importante para una gestión eficaz. Por ejemplo: (más…)